Hace unos días sorprendió la noticia de la muerte de un conocido vecinos de la ciudad, quien de repente fue internado por una afección estomacal que finalmente le costo la vida.
Como empezar una nota donde hay que hablar de la muerte de un amigo, de una persona que hacia unas horas antes estaba charlando con uno, como hacer para dejar de lado el sentimiento que me invade nuevamente cuando escribo esta nota, como ser profesional y no volcar el sentimiento en estas palabras.
No lo puedo hacer, Santiago Dezza, Santi, como le decíamos, ya no esta mas entre nosotros, que no va a estar mas al frente de la legendaria bicicleteria, la cual se la conocía con su nombre.
Nada hacia presuponer este desenlace, el viernes cuando hablaba con el, ni remotamente se nos pasaba por la cabeza que horas mas tarde lo estaríamos despidiendo, compartiendo el dolor de toda su familia.
La ciudad se vio conmovida con la noticia, desde el momento de su muerte en una clínica de Escobar alrededor de la 1 de la madrugada del miércoles 26 de noviembre, luego de estar internado desde el lunes en ese lugar.
no nos importa la causa de su deceso, porque sea lo que sea nos lo llevo al querido amigo, al querido vecino, al querido deportista, al solidario Santi, quien no dudaba en donar una bicicleta a quien se lo solicitara para algún evento solidario, o arreglar alguna bicicleta y no cobrarla, por el era así.
Era un campechano y humilde, alegre hincha de San Lorenzo, cada vez que uno iba a su lugar de trabajo, la bicicleteria, nos recibía con una sonrisa y haciendo muchos chistes a cuanto cliente ingresaba a su negocio.
Nunca lo vi enojado a Santi, nunca un tono elevado de voz, así era el, se hacia querer ni bien uno lo conocía, se brindaba entero, por eso con cuanta persona que me cruzaba en la calle, me decía que querían poner algo en el periódico saludando a la familia.
El ultimo adiós se realizo en cochería Paraná y los restos de Santi, fueron llevados a Escobar, pasadas las 11 hs. del jueves, para ser cremados.
Si tendría que escribir todas las cosas que me dijeron, todas y cada una de las personas que me paro, para decirme algo de Santi, no alcanzaría el periódico entero, también nos enteramos que la clínica donde estaba internado solicito 50 dadores de sangre y se presentaron 100, eso habla a las claras lo que era Santi.Te vamos a extrañar Amigazo, que puedo decir hasta siempre Santi