Cristina en Estados Unidos
La semana pasada nuestra Presidente estuvo en los Estados Unidos, para participar, entre otras cosas, en la Asamblea de la ONU. Los medios de Comunicación, se ocuparon de mediatizar cualquier actividad, hasta los precios de los zapatos y carteras que supuestamente se compró. Menos su presentación en la ONU. Toda la semana escuchando a los periodistas independientes defendiendo a esos pobres chicos argentinos de Harvard, que representaron al periodismo hegemónico, eclipsando la presentación de Cristina en “tan prestigiosa Universidad”, que fue acaparada por ese grupo de estudiantes argentinos, que repitieron las preguntas que se entregaban en panfletos al ingreso a la Universidad. El domingo pasado el señor periodista Lanata, se encargó de mostrar la charla de Cristina con los estudiantes. Tuvo algunos olvidos, por ejemplo, la respuesta que le diera al alumno que preguntó sobre el “cepo” al dólar. Así como tampoco pasó la pregunta del último alumno quien previamente a hacerla, expreso, “yo no voy a preguntar lo que ellos quieren”… ¿Quiénes eran ellos? ¿Qué querían ellos? Tengo mi propia respuesta, pero la dejo a interpretación de cada uno. Personalmente no necesito una conferencia de prensa de la Presidente de los Argentinos, me alcanza con escucharla en cada acto de gobierno, ya que explica claramente lo que está haciendo, lo que quiere hacer y lo que aún falta. Y luego puedo ver en los noticieros, a los que les importa informar todo, las respuestas que Cristina les da a todos los periodistas que se acercan con un micrófono. A veces pienso, que CQC me mantiene más informada que TN y Canal trece. El joven estudiante argentino de Harvard, que hasta hace unos meses fue funcionario de Ministro de Educación de la ciudad de Buenos, Presidente de la Juventud del PRO. Que casualmente llega a Hardvard con una beca del Banco Ciudad, con un costo de más de cincuenta mil dólares anuales. No es un estudiante independiente como quiso demostrar, y así no se legitima la pregunta. No es que la oposición no puede preguntar, pero tampoco debe mentir, es lo mismo que me pongan a mí a preguntarle a Cristina y que digan que soy una docente independiente. Es necesario dejar claro para todo el mundo de donde se pregunta y con qué ideología. Personalmente me hubiese gustado que Cristina les contestara con otra postura, desde su rol de presidente, no desde el rol de militante. Pero la verdad, tampoco creo que pueda juzgarlo demasiado, primero porque es muy difícil ser objetiva, y segundo porque en lugar de ella, no sé como los hubiese tratado ante la postura ninguneante con la que ellos trataron a un jefe de estado. No puedo entender como muchas personas pueden estar de acuerdo con el trato que recibió la Presidente. Y así estuvieron toda la semana, los medios de comunicación y los debates en familia, trabajo, etc. Que si la presidente miente, que si habla o no habla con los periodistas, que si tiene o no zapatos nuevos. Y no hubo repercusiones por lo que considero realmente importante para un país, su discurso ante las Naciones Unidas, donde no podemos dejar de destacar y valorizar lo que dijo en una brillante exposición: * Dejarle en claro al FMI la soberanía política y económica de nuestro país. * Respaldar y seguir pidiendo el dialogo con Gran Bretaña reclamando la soberanía de nuestras Malvinas * El haber dado instrucciones concretas al Canciller Argentino para que se reúna con su par Iraní y avanzar en el esclarecimiento de los atentados a la AMIA y a la Embajada de Israel. Insisto, en nuestro país, lo que está en discusión es un modelo de país. No un gobernante. De nosotros depende tomarnos el tiempo, leer, informarnos, mirar a los demás, escuchar a los que menos tienen, y elegir, elegir qué país queremos para las nuevas generaciones.